Empieza el mes de enero y con él los típicos propósitos de año nuevo. En demasiadas ocasiones nos ponemos unas metas demasiado altas, aunque está bien tirar por lo alto, el incumplimiento de estas puede crear frustración, la frustración nos quita las ganas de seguir adelante y acabamos en un círculo vicioso. Por este motivo os proponemos unos pocos propósitos saludables, que no deberían ser muy difíciles de cumplir, aún así, cada persona debe llegar hasta donde crea. Antes de empezar con las tareas para al nuevo año, se debe tener en cuenta que si no cumple al cien por cien alguno de las metas que se ha propuesto no hay porque agobiarse, lo importante es sentirnos bien con nosotros mismos y llegar hasta donde podamos.
Practicar deporte.
Al empezar el año, mucha gente empieza a salir a correr todos los días, casi hasta sacar las entrañas, sin haber salido a correr nunca antes, esta no es una buena estrategia para llevar a cabo unos propósitos saludabes durante todo el año. No lo es por varios motivos, primero porque si desde el primer momento nos exigimos demasiado es más fácil acabar cayendo en la desgana, y segundo porque debemos acostumbrar a nuestro cuerpo para ir cogiendo el ritmo. No esperemos poder correr la maratón desde el primer día. Para que nuestro cuerpo no se resienta demasiado podemos ayudarnos con colágeno bioactivo para reforzar nuestros huesos y ligamientos.
Hay muchos deportes que podemos practicar, el mero hecho de salir a caminar una hora cada día o coger la bicicleta para algunos desplazamientos diarios nos reportará muchos beneficios a nuestra salud. Actualmente también hay muchos gimnasios o centros cívicos donde ofrecen distintos deportes a precios asequibles como pilates, aeróbic o natación.
Comer mejor.
A veces se nos hace muy cuesta arriba cambiar nuestra dieta, pero hay pequeños pasos que podemos tomar en nuestros hábitos diarios para que no sea demasiado complicado. Por ejemplo, cambiar la pasta blanca por pasta integral es un gesto simple, que le sentará muy bien a nuestro estomago.
Dormir bien.
Una de nuestras funciones corporales más importantes es el sueño, si tenemos problemas para conciliar el sueño existen remedios naturales, que nos pueden ayudar en este propósito. Debemos intentar acostarnos y levantarnos siempre a la misma hora y si es necesario hacer ejercicios de relajación antes de irnos a la cama.
Como veis, es fácil llevar a cabo algunos propósitos saludables, que nos ayuden a tener una vida más sana, por supuesto siempre podemos ir más allá, pero cumpliendo estos pocos hábitos notaremos como nuestra calidad de vida va mejorando poco a poco.
